España
Relatos de nuestros viajes, experiencias y escapadas por España, nuestro maravilloso país, repleto de lugares con algo que contar, enseñar y retrar. Encontrarás también las fotografías y videos tomados durante nuestras estancias.
Sexta ciudad española con más turismo, y quinta en número por número de habitantes, ya tardabamos en visitarla. Motivos, sobraban. La basílica del Pilar por si sola ya se merece una vista. Pero es que toda la ciudad es un amor para recorrer a pie, porque como curiosidad, es la ciudad más grande de Europa que no tiene metro. Conocida en sus buenos tiempos como la Florencia española, la capital del Ebro nos sedujo con su encanto, sus monumentos, la amabilidad de sus ciudadanos, y su ambiente. Zaragoza, es el tubo, y el tubo, es ambiente, es tapeo, es nuestra esencia. Un fin de semana muy completo por Zaragoza, sabe a poco y deja ganas de volver. Lo haremos.
Una ciudad patrimonio de la Humanidad perfecta para visitar en una escapada de fin de semana o puente largo. Nosotros aprovechamos el fin de semana con lunes festivo por ser la Almudena para recorrerla durante tres días, en los que las leyendas se escuchaban en cada esquina de esta ciudad universitaria y monumental, cargada de historia en la que el tiempo parece haberse detenido y donde Melibea y Calixto se enamoraron. Pasear por su maravilloso casco antiguo, visitar la catedral, o simplemente, sentarse en su plaza mayor a la hora del aperitivo a degustar sus famosos torreznos, probar una sopa castellana de las de antes, o degustar una ración de su famoso jamón de guijuelo.
Visitar un castillo de cuento de hadas, que inspiró al mismísimo Walt Disney cuando creo el castillo de blancanieves, seguir las huellas de los romanos en una de sus mas espectaculares construcciones, visitar una de las mas espectaculares catedrales de España con su altísima torre de casi 100 metros, o degustar el espectacular cochinillo asado de Cándido, famoso en el mundo entero, eran algunos de nuestros deseos cuando planeamos la escapada a Segovia, puerta a la sierra de Madrid, y tan cerquita, que no había excusa posible para retrasar mas la escapada en fin de semana. Tantos atractivos y tan cerca.
Si hay algún monumento en España que pugna por formar parte de una de las siete maravillas del mundo, ese es La Alhambra. Imperdonable que todavía hubiesemos visitado la joya arquitectónica islámica más importante del mundo. Jardines, palacios y una fortaleza, símbolo del poderío del imperio Nazarí. Granada, tiene mucho que ofrecer al visitante, que queda atrapado de su encanto si además le coincide con su semana santa. Los barrios del Albaicin, el Realejo, o el Zaidín se visten de gala en unas celebraciones espectaculares y místicas, donde el tapeo es religión, y el pecado, no haberla visitado antes. Cuatro espectaculares días en los que intentamos redimirnos y perdernos por sus intrincadas callejuelas abarrotadas de penitentes, cofradías y turistas pecadores en busca de la perfecta tapa.
No se trata de ir con unas copas de más celebrando el cumpleaños, algo por otro lado, bastante probable en esta elegante ciudad, icono de la belle epoque española, sino de admirar las mas de cien farolas diferentes instaladas a lo largo de la Playa de la Concha en San Sebastián. Estas farolas y la famosa barandilla de la playa tienen su propia historia, y son ya el distintivo de esta bella ciudad, escenario elegido para celebrar mi medio siglo de vida, y es que la ocasión no era para menos, y había que celebrarlo por todo lo alto, como así fue, en la cima del monte Urgull donde las vistas quitan el hipo que pudiera quedar tras los homenajes al cuerpo en la capital de la gastronomía ibérica.
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Decidimos imitar a los millones de turistas que visitan cada año la ciudad condal cada año y recorrer durante algo mas de cuatro intensos días los rincones mas interesantes de esta cosmopolita ciudad, que acoge algunas de las mejores obras de uno de grandes genios de la arquitectura, Antonio Gaudí, singular personaje que murió por las heridas provocadas por el atropellado por un tranvía en Barcelona. Tan pecular era su aspecto que fue confundido con un mendigo y ni conductores ni viandantes acudieron en su auxilio. En estos cuatro intensos días, pudimos conocer algunas de sus impresionantes obras y también algunos de los atractivos mas populares. Cuatro días no son suficientes para conocer todo el legado de esta maravillosa ciudad, pero si nos permitieron disfrutar en cada uno de sus rincones.
Uno de los pueblos con mas encanto de la Comunidad de Madrid, bien se merece una escapada, especialmente, si las fechas elegidas coinciden con la celebración de su representación de la pasión pascual en su peculiar plaza, una maravilla de la improvisación, donde las coloridas viviendas y soportales parecen haber sido levantadas rindiendo pleitesía a ese centro, donde desde tiempos inmemoriales, ha transcurrido su historia y la de sus habitantes, y en la que hoy en día, la reina es su gastronomía. Tapas, y vinos, asados y cocidos, o gigantescas croquetas hacen que este destino, sea en verdad una delicia.
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